Bajada de bandera

Bajada de bandera por Pedro Zabalza
'Taxi!'

Autor: Ray Cooney. Compañía: Almadía Teatro. Dirección: Óscar Orzaiz.Intérpretes: Alejandro Alonso, Ángel García, Carol Vázquez, Raquel Aldaz, Fernando Eugui, Manolo Almagro. Lugar y fecha: Casa de cultura de Artica, 6 de junio.

TODOS nos hemos preguntado alguna vez dónde demonios se meten los taxis cuando se les necesita. Almadía Teatro puede dar solución a este misterio: corriendo de la casa de la mujer del taxista a la casa de la otra mujer del taxista. Éste es el planteamiento de Taxi! , la obra de Ray Cooney que llevan a escena. John Smith, el protagonista, es un taxista con doble vida: tiene una esposa en Winbledon y otra en Chelsea. Por fortuna, tiene también un trabajo con una libertad de horarios que le permite repartirse entre ambos hogares. El equilibrio se rompe el día en que un incidente le obliga a pasar la noche en el hospital. Sus dos mujeres llaman a la Policía, ésta se pregunta por qué tiene dos direcciones, los reporteros sacan fotos… Todo se complica, así que Smith baja la bandera del taxi y comienza una veloz carrera. Run for your wife es el título original de la comedia; un juego de palabras que ya lleva implícita la idea de la velocidad. 

Y es que Taxi! se construye con dos materias primas: velocidad y malabarismo verbal. O sea, los componentes de las comedias clásicas, y estoy pensando en términos cinematográficos. Algo en el tono de Taxi! recuerda al cine, pero donde luce este texto es en el teatro, allí donde el juego se hace patente al primer vistazo, con esa escena dividida en dos partes, las dos casas de Smith. Separadas por varios kilómetros, al espectador le basta con un leve movimiento de ojos para que la pelota vaya de Wimbledon (vaya, qué casualidad) a Chelsea. Y esto es lo que se necesita para construir el enredo: la conjunción de dos espacios en uno solo, de tal modo que las transiciones sean instantáneas (o casi). Basta con un leve cambio de iluminación. Vamos, que Taxi! circula a la velocidad de la luz. 
La bajada de bandera es casi el banderazo de salida de un rally. En esto la dirección de Óscar Orzaiz está acertada: Taxi! se mueve por autopista. El ritmo de la representación es el adecuado, y esto, unido a un buen texto, supone tres cuartos de la fórmula del éxito. Y el enredo urdido por Cooney funciona. Estupendamente, además. Por lo menos a mí me encantan esas historias construidas sobre el equívoco, o mejor: sobre la mentira. Castillos de naipes sobre mesas cojas. Lo único que cuenta es añadir cartas, sabiendo que en cualquier momento todo puede venirse abajo. Y cuando Smith baja la bandera, la de la rendición, se encontrará con que nadie le cree.

Los actores están bien, contagiados del ritmo frenético. Es como hay que estar, por supuesto. Pero eso tiene sus peligros, y en algún momento se escapa alguna réplica un punto estridente. Creo que en las comedias no hay que forzar el gag, sino ceñirse a la naturalidad y dejar que la gracia descanse en la situación. Almadía Teatro lo lleva bien, pero algunas veces el taxi derrapa. Alejandro Alonso encarna bien al atribulado taxista. Ángel García se lleva los mejores momentos de comedia con el personaje más histriónico de todos, lo que tal vez conlleve el riesgo de aparecer a veces demasiado revolucionado. Carol Vázquez da vida a una Bárbara francamente buena, y Raquel Aldaz (Mary) le da una réplica (a distancia) plausible. Fernando Eugui encarna con gran solvencia al inspector Truton y otro veterano de la escena navarra, Manolo Almagro, no le va a la zaga con su Sargento Porter.

Categories: , Share